El vino en nuestra vida · 16 de diciembre de 2022

De dioses y de vino

Dyonisos fue llevado por Hermes, mensajero de Zeus, a un lugar de incomparable belleza para que pudiera crecer en armonía con la naturaleza.

A medida que fue creciendo, Dyonisos, muy bien cuiddo por las Ninfas, fue descubriendo su alrededor con toda la flora y fauna a su servicio. Un día se alejó de sus lugares habituales, y solamente le acompañaba un pajarito que llevaba siempre en su recio hombro.

El pajarito en cuestión, buscando comida, se tragó una semilla de una desconocida planta. Al cabo de poco tiempo, la semilla creció en el interior del pájaro. Evidentemente, y cuando la planta había crecido más que el pobre animal, Dyonisos decidió plantarlo todo en el suelo, y observó que de esta planta salía un fruto delicadamente dulce: la uva.

Esto es un resumen muy breve de la mitología griega que explica el nacimiento de la vid y que encumbra a Dyonisos como Dios del Vino.

Y mientras empieza el fin de semana, y queréis compartir una copa de vino con vuestros amigos, ya podéis divagar sobre los dioses y esta bebida divina que es el vino.